Seguramente, desde hace un tiempo, ya habéis oído hablar o leído algún artículo sobre el Gravel. En nuestras tiendas, ya hace un tiempo que tenemos varios modelos de esta nueva modalidad ciclista. Sí, decimos nueva modalidad porque no la podemos encajar ni en bicicleta de montaña ni en bicicleta de ruta como tal. Así pues, el Gravel ya está entre nosotros y cada vez va ganando más adeptos. Pero… ¿qué es esto del Gravel? ¿Tan diferentes son estas bicicletas a las de carretera o a las de ciclocrós?
Lo más seguro es que no te meterías por pistas de tierra con tu preciosa bicicleta de carretera ni participarías en una marcha cicloturista con tu bicicleta de montaña, pero quizás con una Gravel… si quieres sí. Lee el artículo que te hemos preparado para descubrir la respuesta a esta y muchas otras dudas sobre el Gravel.
La opinión de un profesional
Nos comenta Albert de la tienda de Biking Point Girona que hace unos días mientras entrenaba con el rodillo coincidió en un evento de Zwift con Lachlan Morton, corredor del equipo ciclista profesional Education First Pro Cycling. Es un corredor poco popular para el publico general, pero sí que es algo conocido en el ciclismo por ser uno de los primeros corredores Pro Tour que combina carreras de ciclismo en ruta con carreras y eventos de Gravel. Tuvo la oportunidad de preguntarle qué pensaba del Gravel y le sorprendió su respuesta… le dijo: “No me gusta la palabra Gravel, para mí es montar tu bicicleta por cualquier terreno, por cualquier lugar, cuando yo quiero.”
La verdad es que tiene toda la razón del mundo y podemos coger sus palabras como una buena definición del concepto Gravel. Esta modalidad de ciclismo evoca libertad para ir con tu bicicleta por prácticamente cualquier terreno y en cualquier circunstancia. Podríamos decir que es una de las bicicletas más polivalentes, actualmente, y en los próximos años puede convertirse en una opción muy recomendada como bicicleta única, ya que podemos montar por pistas de tierra o asfalto sin ningún problema.
Particularidades del Gravel
A simple vista, una bicicleta de Gravel os puede parecer una bicicleta de carretera con ruedas más anchas, y así es y no es a la vez, ya que tiene algunas características muy especiales. Es verdad que el manillar curvo y, en general, la ausencia de suspensiones le hace parecer una bicicleta de ruta, pero su geometría marcadamente endurance, sus amplios pasos de ruedas y la multitud de opciones de anclaje de portabiones y accesorios la delatan enseguida.
1. Geometría específica
La mayoría de bicicletas Gravel que podemos encontrar actualmente están desarrolladas para realizar grandes rutas y pasar mucho tiempo encima de la bicicleta, por lo tanto necesitan ser lo más cómodas posibles. Su geometría es mucho más relajada que una bicicleta de ruta. Las principales diferencias que podemos encontrar son: los ángulos de dirección y sillín más relajados, una distancia entre ejes de rueda mayor o una caja de pedalier más baja para tener el centro de gravedad más cerca del suelo.
2. Posición en la bicicleta
La posición encima de la bicicleta es, de forma general, más relajada que una bicicleta de ruta estándar. Esta posición se consigue con un tubo horizontal algo más corto (reach) y una pipa de dirección alta (stack). En definitiva, se busca conseguir una bicicleta más estable, más cómoda y mucho más dócil de conducir. Algunas marcas ya están incluyendo sistemas de absorción de vibraciones del terreno o incluso suspensiones de corto recorrido.
3. Neumáticos más anchos que los de carretera
Los neumáticos son más anchos, normalmente rondan entre los 38mm a los 47mm y con un perfil de taqueado prácticamente ausente. Dependiendo del terreno en el que nos aventuremos, quizás es conveniente una cubierta con más o menos taco, ahora mismo hay infinidad de opciones en el mercado y cada vez la oferta va en aumento. Hablando de las cubiertas, hay que tener en cuenta que la mayoría de modelos de bicicleta son compatibles con ruedas 700 o 650b, eso quiere decir que podemos montar neumáticos 700×38 prácticamente sin taco para rodar en buen piso o optar por 650bx47 para tener mucho más volumen de aire en las cubiertas y poder ganar en comodidad y absorción en situaciones más comprometidas.
4. Capacidad de carga
Otro de los puntos a destacar es la gran capacidad de carga de este tipo de bicicletas, normalmente se opta por un mínimo de dos o tres anclajes para portabidones a parte de la opción de montar alforjas delanteras, traseras, todo tipo de bolsas, etc. Esto convierte nuestra bicicleta de Gravel en una bicicleta completamente preparada para nuestras grandes aventuras de “backpacking”.
5. Frenos potentes
Como es normal en este tipo de bicicletas, predomina el uso de los frenos de disco. Estos son óptimos para conseguir una buena frenada en cualquier condición y sobre todo, son indispensables para tener la suficiente potencia de frenado si vamos cargados con nuestras mochilas o portabultos.
6. Desarrollos en Gravel
Los desarrollos que montan este tipo de bicicletas han evolucionando a pasos agigantados. En unos inicios, se montaban desarrollos de carretera compact convencionales, pero desde hace un tiempo Shimano ha apostado por esta modalidad y ha creado un grupo especifico para bicicletas Gravel, el famoso GRX. Con este grupo, conseguimos un amplio desarrollo para rodar de forma cómoda en llano y tener suficiente margen para las subidas más duras. Normalmente, se opta por montar un plato de 46 o 48 grande y un plato de 30 o 32 pequeño y completarlos en la parte trasera con los cassettes de 11v de 11-36 hasta 11-42 dientes.
No podemos olvidarnos de Sram, otro gran fabricante de transmisiones entre otras cosas, que normalmente opta por montar monoplatos de 12 velocidades con platos de 38 o 40 y desarrollo trasero de 12v de 10-50 dientes. La introducción de las transmisiones Sram AXS permiten la combinación de piezas de carretera (manetas, frenos, bielas) y montaña (cambio trasero y cassette) para obtener mayor polivalencia de desarrollos. Hay multitud de opciones y cada uno debe escoger la que mejor le convenga.
Uso no competitivo de la bicicleta
Con una bicicleta de gravel no vais a ganar ningún critérium local o marcha cicloturista, pero estamos seguros de que os va a sorprender lo rápido que puedes ir por el asfalto con una bicicleta de este estilo. Como hemos comentado anteriormente, la posición es muy relajada y se asemeja a la posición de bicicletas de carretera de categoría gran fondo o endurance y también dispondréis de una buena relación de cambios para un uso no competitivo. Por esta razón, es una de las bicicletas más recomendadas para las zonas donde los inviernos son más duros y seguir con los entrenamientos invernales y ya no solo limitaros a rodar por asfalto.
Como habéis podido ver, una bicicleta de Gravel nace para ser lo más polivalente posible, con ella podemos hacer prácticamente cualquier tipo de ruta, ya sea totalmente en asfalto, combinación de asfalto y tierra o solo tierra. La podemos utilizar para ir al trabajo, para ir a por el pan, para esos días de invierno con la carretera sucia… En definitiva, es una bicicleta para todo. Lógicamente tiene sus limitaciones, en este caso las rutas más agresivas: senderos técnicos, trialeras o descensos. No podremos disfrutarlos como si lleváramos una bicicleta de montaña de doble suspensión, pero si eliminamos este tipo de tramos de nuestras rutas la bicicleta de Gravel, tendrá un rango de uso muy amplio y perfectamente adaptable a un gran número de personas.
Para acabar este artículo, os mostramos diferentes opciones de Gravel disponibles en nuestras tiendas Biking Point:
- Scott Speedster Gravel 20 2020
- Scott Speedster Gravel 30 2020
- Giant Revolt 2 2020
- Giant Revolt Advanced 3 2020
- Giant Revolt Advanced 2 2020
Y hasta aquí, nuestra explicación sobre esta nueva modalidad del ciclismo. ¿Qué te ha parecido? ¿Eres fan del gravel? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
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