Noticias

Cómo entrenar en el rodillo te puede hacer ganar la París-Roubaix

Sin lugar a dudas, ganar una de las carreras más prestigiosas del mundo no es tarea fácil, te hará falta mucho más que un rodillo de entrenamiento es más, seguramente, te harán falta muchos años de entrenamiento y dedicación que tienen los profesionales. Y por supuesto, cómo no, el punto de suerte que tienen todos los ganadores para superar todos esos adoquines y carreteras embarradas sin tener ningún percance.

Dicho esto, os queremos contar una anécdota muy curiosa que enlaza los entrenamientos indoor con el cruzar la línea de meta del velódromo de Roubaix en primer lugar después de recorrer sus 260km.

Nos situamos en el pelotón profesional ciclista la temporada 2016, concretamente en el día de la carrera Omloop Het Nieuswblad, la primera de las carreras belgas que abren la temporada de adoquines como se nombra en el mundillo ciclista. A 40 kilómetros de meta, se produjo una caída en el pelotón que tuvo como resultado una fractura de radio para Mathew Hayman, un ciclista poco conocido del equipo Orica Scott. Como podréis suponer es el protagonista de la historia.

El diagnóstico era, sin duda, muy malo para llegar en las mejores condiciones a una de las grandes citas de la temporada ciclista: la París-Roubaix. Lógicamente, los médicos y personal del equipo descartaron a Hayman para participar en esta carrera tan exigente física y mentalmente.

Para quienes no conozcan el perfil de Hayman, se trara de un ciclista de equipo, muy involucrado en trabajar para sus compañeros y con pocas victorias en su palmarés. Eso sí, es un enamorado de la París-Roubaix. A seis semanas de la competición, Hayman y su preparador físico comienzan a trabajar en la recuperación.

Hayman pasa de estar en sus carreteras de entrenamiento habituales a su nuevo espacio y equipo de entrenamiento: su garaje y un rodillo. Con el fin de no perder la forma y poder seguir ejercitándose con la fractura del brazo, empiezan un programa de entrenamiento de unas 20h semanales y dos sesiones diarias sobre rodillo. Para mantener la motivación suficiente, Hayman utilizó algunas de las plataformas virtuales de entrenamiento.

Su entrenador y él dividían los días en doble sesión de entrenamiento. Por la mañana, seguía haciendo trabajo de base combinado con intervalos de 4 o 5 minutos y hacían especial hincapié en gestionar muy bien la recuperación y la fatiga en todos los entrenamientos. Se dieron cuenta que con el trabajo sobre el rodillo gestionaba muy bien los esfuerzos y se volvía más eficiente en su pedaleo. 6 semanas después del accidente estaba listo para afrontar la carrera de sus sueños.

El día de la carrera y después de 200km escapado del pelotón principal, Mathew Hayman era alcanzado a pocos kilómetros de la meta por la gran estrella belga y favorito al triunfo: el sprinter Tom Boonen. Nadie cuenta con él para la victoria y que, teóricamente, Boonen és un ciclista más completo y con sprint superior, pero al entrar dentro del velódromo, a media vuelta del final, Hayman lanza su sprint sin mirar atrás. Cruza la línea de meta con incredulidad de haber ganado la carrera de las carreras, delante de uno de los mejores ciclistas de la historia y después de haberse fracturado el brazo semana antes.

Es el claro ejemplo de que la constancia sumada a un buen programa de entrenamiento con rodillo, te puede llevar a lo más alto del universo ciclista. Hayman ganó con la primera bici Scott Foil que tiene el mismo cuadro que el modelo actual, una aero con transmisión Shimano Dura-Ace que quedará siempre en la memoria ciclista.

Y hasta aquí esta gran anédota que seguro que te motivará para entrenar en el rodillo en casa. ¿Te ha gustado? ¡Cómentanos que te ha parecido más abajo!

¿Quieres conocer las novedades para el 2020 de nuestras marcas? Aquí están:

Recuerda que puedes seguirnos en nuestras redes sociales y suscribirte a nuestro canal de Youtube para ver reviews de nuevas bicicletas y productos.

Deja una respuesta